Habrán oido hablar de KickStarter. Si no lo hicieron, les cuento que es una página que promueve emprendimientos, un fondo de inversiones norteamericano. Quien tiene un proyecto y no tiene el dinero para financiarlo puede exponer en KickStarter durante 28 días, y quienes quieren apoyar a la financiación del proyecto donan dinero o adelantan el pago de una unidad (por ejemplo) de lo que sea que el proyecto producirá.
El año pasado un uruguayo, Rafael Atijas, desarrolló un proyecto en base a una guitarra para niños. No un juguete, una guitarra especialmente pensada para que un niño toque música. El proyecto fué un éxito: Atijas pretendía recaudar 15.000 dólares y logró 65000.
Ahora un grupo de desarrolladores plantea la creación de una consola de juegos que cueste 100 dólares, llamada OUYA. Interesante, ¿no? Basada en Android, código abierto y un llamado a los hackers para que la mejoren como quieran, este proyecto recaudó un millón de dólares en un sólo día, con una meta de 950.000. Van por los 3 millones y medio y todavía les queda un mes.
Los dejo porque se me está cayendo la baba y me tengo que limpiar.
Up the Irons!